lunes, 18 de julio de 2011

Wittgenstein. Sobre el Lenguaje

El problema del control de la natalidad en los adolescentes.

Actualmente vivimos en un mundo donde ya hay un sinnúmero de avances tecnológicos, en donde la información se encuentra a la vuelta de la esquina y los adelantos médicos son cada vez más sorprendentes uno de ellos son los métodos anticonceptivos, los cuales han marcado una revolución en las formas de vivir la sexualidad, ya que le dan a la pareja la posibilidad de elegir en qué momento quieren tener descendencia.

Esto permitió que hubiera un distanciamiento entre el sexo y la reproducción de que se dejara de pensar y vivir el sexo como únicamente un medio de reproducción, empezó a tener cada vez mayor importancia la dimensión del placer y en teoría estos solucionarían el problema de los embarazos no deseados y el de la sobrepoblación pero ¿Por qué aun hoy en día siguen embarazándose los adolescentes de manera significativa?

Para responder a esta pregunta habría que pensar en algunos factores que hacen que aun cuando los anticonceptivos están ahí, los adolescentes no los usan, un primer factor seria n las constantes campañas de grupos moralistas que buscan por medio de una serie de discursos el seguir pensando el sentido del sexo como meramente reproductivo, y creando culpa en los jóvenes que intentan vivir sus sexualidad de forma placentera y sin buscar descendencia.

Aunado a esto lanzan campañas en las cuales buscan ligar los métodos anticonceptivos con la precocidad en las relaciones sexuales, venden la idea de que los métodos de anticoncepción solo producen que las relaciones sexuales entre los jóvenes sean a edades más tempranas, y que el riesgo de contagio de alguna de las enfermedades de transmisión sexual sea más alto.

Por otro lado un factor que también contribuye de manera importante al poco uso de los anticonceptivos es la mala información que hay sobre las formas correctas de usarlos, esto pude parecer muy paradójico ya que en teoría existen muchas campañas que difunden los métodos anticonceptivos, ¿pero entonces porque no producen el efecto deseado?

Un problema radica en su excesivo tecnicismo se usa un lenguaje muy elaborado, demasiado técnico que no les hace sentido a los jóvenes, la mayoría del personal que explica su uso son médicos o personal de enfermería y se centran mucho en darles el nombre adecuado anatómicamente aludiendo que esto le da mayor seriedad al tema y permite que se entienda de mejor manera, aunque produzca el efecto contrario.

Encontramos salones de usos múltiples o salas generales de primarias secundarias abarrotadas de jóvenes aburridos y hartos de estas conferencias, con enfermeras con nada de sensibilidad ante las posibles dudas de los adolescentes, donde no hay espacio para la expresión, se les informa de los anticonceptivos pero no de las relaciones sexuales, no incorporan la dimensión del placer en su discurso, como si el sexo fuera una cuestión de técnica y de un conjunto de procedimientos que hay que seguir en un cierto orden y que nos llevan a un resultado.

Mientras no se explique las formas de control de natalidad de forma simple, sencilla con un lenguaje acorde a la edad de los jóvenes, ya que es una completa incongruencia que se les de la misma charla a niños de sexto de primaria que se les da a los chicos de secundaria, parecería que uno o dos años no son muchos pero en ese periodo de vida si lo son, hay una gran cantidad de cambios no solo en el desarrollo físico, también en el psicológico, por eso se necesita una forma de transmitir el mensaje acorde a cada edad, pero sobre todo no solo explicar , también escuchar las dudas, las inquietudes, los miedos, para poder brindarles una vida sexual mucho más satisfactoria a los adolescentes y que no tengan que pagar el precio de un embarazo no deseado.

Wittgenstein (3 de 3) en "La aventura del pensamiento"

Wittgenstein (2 de 3) en "La aventura del pensamiento"

La aventura del pensamiento,Wittgenstein PARTE I